Raza originaria de Tailandia, el Korat le debe su
nombre a una provincia. Su nombre, además, significa “buena suerte”. La
primera vez que se tiene constancia de este gato es en el S.XIV. Su
cría profesional comienza en el año 1959 en EEUU, año en el que llega a
aquel país. A Europa llega en el S.XIX pero no fue un gato demasiado
popular.
La raza Korat es de tamaño mediano. Su cuerpo,
musculoso y flexible, presenta suaves curvas. Su cara y su cabeza tienen
forma de corazón. Su aspecto es de gato pequeño y ligero, aunque es
más pesado de lo que parece. Sus orejas, grandes y anchas en la base,
tienen las puntas ligeramente redondeadas. Sus redondos ojos, también
grandes, son azules al nacer, luego cambian a ámbar con un poco de
verde alrededor de la pupila, y aproximadamente a los dos años de edad
éstos se tornan verdes y luminosos.
Presenta una única capa de pelo corto, que siempre es
azul y con la punta plateada. Su pelaje liso, está asentado al cuerpo y
es muy suave y sedoso. Como no tiene subcapa de pelo, es un animal muy
friolero. Es fácil de peinar y mantener. Será suficiente cepillarlo
una vez por semana.
Los Korat son gatos muy activos, ágiles, vivaces y
muy juguetones,. Aún así, son bastante tranquilos, y el barullo les
agobia. Son poco sociables otros animales y algo introvertido con los
extraños. Pero con sus dueños es dulce, cariñoso, hipersensible y muy
cercano. Pide mucho amor y atención, aunque también lo da.
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