Gato somalí

Carácter

Se trata de un gato inteligente, equilibrado y calmado, aunque también da muestras de un carácter alegre y juguetón. Es obediente, cariñoso y dócil, por lo que es un gran amigo de los niños. A pesar de tener un abundante pelaje, no tolera el clima muy frío. Se trat de un gato muy familiar, que prefiere estar el apartamento al campo, aunque tampoco le importará pasar algun día fuera de las paredes de casa. Se trata de un felino curioso e inteligente que no tardará en hacerse dueño de la casa, abriendo cajones y armarios.

Características

El gato somalí se caracteriza por tener un cuerpo armonioso y musculado. Se trata de un gato de tamaño mediano o grande. Los machos pueden llegar a pesar hasta siete kilos mientras que las hembras pueden llegar a los cinco kilos y medio.  Se trata de un felino con una cabeza amplia y de pelo corto. Sus orejas son grandes, afiladas y siempre atentas a todo lo que acontence a su alrededor. Sus ojos pueden ser de distintas tonalidades: cobre, verde, dorado o marrón.  Tiene una cola larga y su pelaje es abudante, de modo que recuerda a un zorro.

Orígenes

Durante algun tiempo, en algunas camadas de Abisinios, aparecieron gatitos de pelo largo que los criadores descartaban de inmediato. Sin embargo, a partir de 1960 distintos criadores empezaron a mostrar interes por estos felinos. La americana Evelyn Mague consiguió un cachorro de pelo semilargo y con él empezó esta nueva raza, que ella denominó “Somalí”, por su semejanza con Somalia, país del que procede el Abisinio.

Razas de gatos: Somalí

De aspecto salvaje, el gato Somalí tiene el aspecto de un pequeño zorro. Sus orígenes hay que buscarlos en los gatos abisinios. De físico elegante y sobrio, se trata de un gato de gran tamaño, con unas orejas muy afiladas. Su caracter tranquilo y dócil le convierte en un gran amigo de los niños.

El pelo es medio largo, y algo “salvaje” y existen tres variedades: el somalí rojo, punteado rojo-marrón con franjas de marrón- chocolate; el color típico usual o dorado (“ruddy”), punteado marrón con franjas de marrón más oscuro o negro, y el somalí azul, punteado azul-gris con franjas de color más oscuro. Algunos criadores están introduciendo otras variedades nuevas.

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Razas de gatos: Himalayo

El nombre de esta raza proviene del gran parecido que presenta su patrón de color con el encontrado en el conejo Himalayo. Esta raza es el resultado de un cruce de gato siamés con persa. Por ello, el Himalayo, es un gato coloreado como el siamés, pero que tiene los rasgos característicos de la raza Persa. Esta combinación de rasgos le da un aspecto de real elegancia.
La raza Himalaya tiene rasgos del persa como la cabeza redonda, de aspecto macizo, sobre un cuello corto y ancho. El hocico chato y ancho, las orejas son pequeñas e inclinadas hacia delante y el cuerpo es ancho de patas cortas.
Las características que posee del siamés son las puntas coloreadas y los ojos azules. Además, puede presentar la mayoría de los colores del siamés: gris foca, azul o lila, todos ellos manchados.

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¡Tu gato quiere unos dientes sanos!

Has pensado en la higiene bucal de tu gatito? Tener unos dientes insanos genera muchas enfermedades, además de provocar mal aliento. Cepillar la boca de nuestra felino puede parecer una misión de alto riesgo, pero con algunos consejos y un poco de paciencia harás que tu mascota luzca la mejor de las sonrisas! 

¿Cómo cepillaremos sus dientes?

La higiene implica salud y es fundamental en nuestra mascota. Los ojos y oídos, la boca y el pelo, tienen que estar bien limpios si queremos que nuestra mascota tenga una salud de hierro y luzca un aspecto inmejorable. Para vencer las enfermedades bucodentales, la mejor prevención es el cepillado de los dientes.

Las primeras veces que limpiemos la boca de nuestro gatito, usaremos nuestro dedo, envuelto en una gasa, en lugar del cepillo tradicional.  Cuando veamos que ya no le produce rechazo, usaremos el cepillo, que tendrá que ser de mango y adaptado al tamaño de su boca

Le limpiaremos los dientes de forma suave y con paciencia, con muchísima paciencia. El cepillado debe ser de arriba abajo y de abajo a arriba y usaremos un dentrífico especial para gatos.  Primero limpiaremos la parte externa y cuando consigamos que abra la boca, pasaremos a limpiar la parte interna. Prestaremos especial interés a las encías y a los espacios que haya entre los dientes.

Tenemos conseguir que lo entienda como una rutina, por eso es aconsejable establecer un horario. De este modo verá el cepillado como una tarea diaria más, como la de salir a pasear o comer. También es bueno que una vez hayamos terminado, le demos una recompensa en forma de galleta o juego. Esto le estimulará para las próximas veces.

Productos sustitutivos.

Existen algunos productos sustitutivos como las galletas, que se usan para evitar que se queden restos de comida entre los dientes. Se trata de una opción que debe contribuir a su higiene bucal pero no debemos usarlo como sustituto del cepillado.

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Los ojos y oidos de tu gato… ¡siempre limpios!

Una correcta higiene de nuestro felino lo prevendrá de posibles enfermedades, a parte de garantizarnos un buen aspecto. Es por eso que no debemos olvidarnos de la correcta limpieza de los ojos y de las orejas. Estos puntos son los grandes olvidados y pueden conducir a gaves problemas si no se limpian correctamente.

¿Cómo limpio los oidos?

La higiene de un gato es muy importante. Los dientes, los oidos, los ojos, el pelo…  todo debe estar bien limpio. Por eso un buen baño de tanto en tanto, tampoco le vendrá mal.  Antes de empezar, debemos darles un vistazo, por si presentan alguna anomalía. Si vemos algúnn tapón de cera oscura, algún punto inflamado o observamos un comportamiento extraño de nuestra mascota, es mejor acudir a nuestro veterinario de confianza.´

Los oidos deben limpiarse con mucha delicadeza. Un algodón empapado con alcohol de setenta grados nos bastará para limpiarlos. Lo frotaremos suavemente, haciendo movimientos circulares. No es aconsejable utilizar bastoncillos de algodón ya que podrían perjudicar el conducto auditivo de nuestra mascota.

¿Cómo limpio los ojos?

Los ojos son otra parte muy delicada de los gatos. Éstos acumulan muchas legañas alrededor de los ojos, que si no se limpian pueden llegar a producir dolencias como la conjuntivitis.

Para limpiarlos, el mejor método es utilizar un algodón ligeramente empapado que moveremos siempre alrededor de los ojos, sin llegar a tocar el globo ocular.

Lo aconsejable es limpiarlos cada dos días, aunque si tienes un gato persa, mejor acostumbrate a hacerlo diariamente.

Mejor limpialos cada dos días, aunque si tienes un gato persa, por ejemplo, deberás hacerlo diariamente.

 

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¡Cuidá el pelo de tu gato!

El cepillado de nuestro gato es muy importante. Nos permite controlar si existe algún tipo de problema en el pelaje, en los ojos y en los oídos, además de permitirnos ver si existe algún parásito. Cepillar el pelaje de tu gato semanalmente, hará que tenga un pelo más brillante y sano.

El cepillado, completa su higiene

Si tienes un gatito, lo mejor es que lo costumbres al cepillado cuanto antes. Es aconsejable empezar con sesiones cortas y hacerlo de forma muy delicada. El correcto cepillado del pelo, así como una buena limpieza de los oídos y ojos, una buena higiene bucal y darle un baño de vez en cuando, hará que tu gato tenga un aspecto y una salud inmejorables.

Tipos de cepillado

Los gatos de pelo corto no necesitan un cepillado muy exhaustivo. Bastará con usar un solo cepillo y hacerlo de forma semanal.

Los gatos de pelo largo, en cambio, necesitan dos tipos de cepillo. Uno de dientes anchos, para desenredar los nudos, y otro más suave para peinar el pelo de la cara.

Eso sí, nunca les cepillaremos la barba ni los pelos cercanos a los ojos, ya que esto le podría enrabietar.

Proceso de cepillado

El proceso de cepillado es el mismo para todos los gatos, tengan el pelo que tengan. Siempre debemos empezar cepillando de abajo hacia arriba, dejando la cola para el final.

Primero nos recrearemos en las partes del cuerpo donde parezca que disfruta más y poco a poco le cepillaremos el resto del cuerpo. Eso sí, siempre agarrándolo con fuerza porque un cepillo puede resultarle amenazador.

En las épocas de muda de pelaje deberemos repetir la frecuencia del cepillado diariamente.

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¡Al agua gatos!

Los gatos son animales muy limpios y meticulosos por naturaleza y aprenden a limpiarse ellos solitos usando las patas y la saliva. Gracias a esta característica innata, no debemos preocuparnos en exceso de su higiene…. Pese a todo es aconsejable darles un baño de forma esporádica, así como limpiar sus dientes, los oídos y las orejas.  Pero cuando llega el momento es importante extremar las precauciones si no queremos que se convierta en una batalla campal…

FRECUENCIA.

Por lo general, bañaremos a nuestro gato de forma muy esporádica. Aunque puede que se haga imprescindible en algunas ocasiones especiales. Por ejemplo cuando precisamos combatir los parásitos externos , cuando está muy sucio o cuando tiene alguna sustancia venenosa en su piel.  Antes o después del baño, no debemos olvidarnos de la limpieza de los dientes, algo fundamental en su higiene.

LUGAR

El fregadero de la cocina  por extraño que parezca, puede ser el lugar más adecuado para bañar a nuestro gato: no nos tenemos que agachar y además podemos controlar el felino. Un consejo es colocar una toalla o una alfombra de hule en el fondo para que pueda clavar las uñas.

TEMPERATURA.

La temperatura del agua no debe ser superior a los 37 grados. Antes de bañarlo lo iremos relajando y no dejaremos de acariciarlo hasta que termine el baño

JABÓN

Respecto el jabón que usamos tendrá que ser uno especial para felinos. El jabón para humanos le resecará la piel y la dejará susceptible a las pulgas. Además puede causarle alguna infección, sobre todo si se lame la piel.  También hay jabones especiales para dueños alérgicos.

ENGUAJE

Una vez hayamos aplicado el champú insistiremos en frotar bien todas las partes de su cuerpo, prestando especial interés a las patas, la cola y el vientre. Es aconsejable utilizar poca cantidad de jabón para así enjuagarlo con facilidad. Es importante evitar que el chorro del agua entre a las orejas y a los ojos y evitar así dolencias como la otitis

SECADO

Normalmente lo secaremos con una toalla. El uso de secadores suele incomodarles. Aunque si están acostumbrados, es una forma rápida. Es  importante secarle bien las orejas, por si hubiera entrado algo de agua en el canal auditivo.

Un último consejo es darle un premio a tu gato después del baño. ¡Seguro que así asimila mejor el proceso!

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